Una entrevista de Luis Eduardo García
El 20 de noviembre del 2024, el doctor Roberto Flores Guevara presentó en el paraninfo de la Facultad de Medicina de San Marcos, casi sin repercusión mediática, dos fotos inéditas de César Vallejo. Cinco meses después Valentino Gianuzzi, ofreció una conferencia en la que presentó estas mismas fotos y detalló las circunstancias en que fueron tomadas: la expulsión de Vallejo del suelo francés a finales de 1930. Vallejo fue citado a la prefectura el 17 de diciembre de ese año y ahí se le notificó su expulsión por militante comunista, además de tomársele las fotografías. Aquí un diálogo con Valentino Gianuzzi, quien junto con Carlos Fernández, son dos de las autoridades más grandes sobre la vida y obra del poeta peruano.
¿Cómo llegaste al hallazgo de las dos nuevas fotografías de Vallejo? ¿Qué ruta seguiste?
Cuando estábamos editando la Correspondencia de Vallejo, Carlos Fernández y yo pedimos una copia del expediente de Vallejo en el Ministerio del Interior de Francia. Ahí mismo, en un informe que el prefecto le enviaba al ministro, se decía que se acompañaba una foto de Vallejo, pero la foto no estaba en ese file (a diferencia del expediente similar de Juan Luis Velázquez, que sí tenía su foto). Decidimos entonces ir al origen, así que teníamos planeado visitar el archivo de la Prefectura de la Policía en París. Pude hacer esa visita a París en junio del año pasado y ahí pude dar con la esperada foto, que resultó siendo doble: una de frente y una de medio perfil.
¿En qué circunstancias fueron tomadas las fotos?
Las fotos dan cuenta del episodio de expulsión de Vallejo del suelo francés a finales de 1930, del cual ya habían dado testimonio Georgette de Vallejo, Demetrio Tello, Armando Bazán y Juan Larrea, entre otros. La historia es más o menos conocida: la policía le hacía un seguimiento al sindicalista Lino Larrea que había visitado Moscú. Vallejo, Bazán y Velázquez, entre otras personas fueron a despedirlo a la estación del tren a su regreso al Perú, y fueron interpelados por la policía. Vallejo fue citado a la prefectura el 17 de diciembre y ahí se le notificó su expulsión por militante comunista. Se tomaron entonces las fotos, se entiende que para distribuirla en los puestos de frontera y poder evitar que vuelva a entrar al territorio francés.
Paralelamente otro investigador, que pertenece al ámbito de la Medicina, presentó los mismos resultados hace unos meses. Leí una comunicación tuya por redes dónde admites, con mucha honestidad que no tenías conocimiento de esto.
Sí. El doctor Roberto Flores Guevara había realizado una investigación en archivos franceses y había presentado sobre ello una charla en noviembre en la Facultad de Medicina de San Marcos. Aunque la charla estaba colgada en Facebook, no tuvo la resonancia que merecía y ni yo ni ningún vallejista que yo conozca sabía de esa conferencia que, por otra parte, no era específicamente sobre las fotos, que se mostraron solo brevemente. Supe de la charla gracias a un comentario en redes de alguien que había asistido. Era entonces de justicia llamar la atención sobre ella y corregir mi afirmación, errónea, de que las fotos eran totalmente inéditas.
¿Es posible una poligénesis? Tengo dudas acerca de si uno puede llegar al hallazgo de algo partiendo de cero?
Creo que, con respecto a Vallejo, nadie parte desde cero. En este caso, la noticia sobre la expulsión de Vallejo de Francia es conocida; y luego, un documento te lleva a otro. Simplemente se trata de seguir pistas y saber a qué archivos acercarte, algo que no muchos hacen. Carlos y yo hacemos desde hace mucho ese tipo de búsquedas, y tenemos identificados varios archivos que queremos visitar, en Perú, Francia, España y Rusia.
En todo caso, ¿a qué se debe esta falta de comunicación entre investigadores?
Creo que, a pesar de los adelantos de la comunicación, muchas investigaciones siguen en compartimentos y se mueven en espacios separados. Como especialista, uno trata de estar al tanto de lo más recientes, pero no es infalible. En el caso de la investigación del doctor Flores, la Facultad de Medicina es un foro que está fuera del radar de los estudiosos de Vallejo, e incluso de los especialistas en literatura.
¿Qué importancia tienen para la iconografía de Vallejo estos hallazgos?
Son pocas las fotos que hay de Vallejo, así que cualquier hallazgo en este sentido es importante. Estas de 1930 son particularmente significativas por su nitidez. Eran imágenes de vigilancia y de control, y por ello era crucial capturar los rasgos faciales del sujeto. Son imágenes que, a diferencia de sus otras fotos más usadas, no tienen mucho contraste. Es una paradoja que las fotos más nítidas de Vallejo sean producto de un episodio tan triste de su biografía.
De acuerdo a las pistas que has seguido, ¿es posible que en un futuro mediato se puedan encontrar más fotos y, tal vez, cartas y otros documentos personales de Vallejo?
Desde la publicación de la Correspondencia en 2023, Carlos y yo ya hemos encontrado casi una decena de cartas nuevas, así que deben salir novedades en los próximos años. Que Wilmer Cutipa haya podido, hace poco, encontrar un poema desconocido es prueba de que trabajar en los archivos, incluso en lugares no tan recónditos como la hemeroteca de la Biblioteca Nacional, da resultados.
Estas fotos, aparte de las que le sacó Juan Domingo Córdoba, son especiales. Son fotos de primer plano, que revelan un gesto adusto, unos ojos vidriosos y a un tipo vestido como un dandy. Son fotos de 1930. ¿Qué pasaba por su vida entonces?
Era un Vallejo bastante comprometido políticamente, y este compromiso se traducía en participar en protestas y en un activismo significativo, como da cuenta el archivo policial. Era también un Vallejo que, en el ámbito literario, acababa, por un lado, de publicar la segunda edición de Trilce y que, por otro, seguramente ya tenía planeado El tungsteno, Rusia en 1931 y alguna obra teatral. Era un Vallejo con una escritura muy activa y en proceso de cambios. El exilio en España tras su expulsión lo obligaría a insistir sobre esas nuevas escrituras.
¿Por qué Vallejo parece un autor interminable, alguien cuya vida y obra nunca terminamos de agotar?
Como todo gran escritor, Vallejo creó un universo propio. Uno puede conocer bien su poesía, que no es voluminosa, pero Vallejo ahí no se acaba. Hay que explorar la narrativa, el periodismo, el teatro, los libros sobre Rusia, donde siempre habrá cosas nuevas que nos sorprendan y que complementen sus poemas.
¿Han pensado usar la inteligencia artificial para ubicar documentos o seguir más pistas en la reconstrucción biográfica de Vallejo? Supongo que la IA no sería mala para una labor detectivesca.
Si te soy sincero, no sabría cómo utilizar la inteligencia artificial para ese tipo de búsquedas. Creo que eso implica que los archivos estén mayormente digitalizados, pero lamentablemente esos proyectos de digitalización escasean.
