«Chunka ñawpa hawarikuna» (Maquinaciones, Lima, 2024) de Mario Waranqhamaki refleja, desde lo entrañable de la lengua quechua, la forma en que las culturas antiguas entendían el mundo, y brinda perspectivas únicas de epifanía sobre la condición humana, la naturaleza y los valores fundamentales. El libro nos recrea la cotidianeidad tanto de un tiempo remoto (de alcance mítico), para acercarnos a las normas y principios que regían en la antigüedad, como de un pasado más o menos cercano (de tono testimonial) que da cuenta del abuso perpetrado por los hacendados cuando tenían el poder de decidir sobre el destino de los indígenas.
Este nuevo título de Maquinaciones, que se traduce como «Diez historias antiguas», será comentado el jueves 1 de agosto, en el auditorio Clorinda Matto de la 28ª FIL de Lima (Parque Próceres de la Independencia, Jesús María), por la catedrática Nora Cárdenas, quien se encargó del asesoramiento editorial y el cuidado de la edición de este libro escrito totalmente en quechua (variante Cusco Collao). «Chunka ñawpa hawarikuna» será presentado junto con otros dos libros de las editoriales Alastor y Heraldos Negros. Estos sellos, junto con Maquinaciones, forman parte de la Federación de Editoriales Independientes del Perú (FEIP), cuyo stand (el número 66) alberga cerca de doscientas novedades editoriales.
Mario Waranqhamaki (Cusco, 1974) es profesor de EIB primaria, narrador oral tradicional indígena inkasimi runasimi, traductor e intérprete autodidacto. Hijo de padres quechuahablantes cusqueños, estudió la primaria en la escuela de Chiwanpata (Cusco), y la secundaria, en la Gran Unidad Escolar Ricardo Palma de Surquillo (Lima). Siguió educación en el ISPP Raúl Porras Barrenechea, y un diplomado en EIB en la Universidad Enrique Guzmán y Valle. Es autor de «Leyenda inka, Intiq ch’awchun Manq’o Qhapaq erqe kayninmanta wayna kanankama» (2023). Como narrador oral se ha presentado en diversos espacios culturales en diferentes puntos del Perú.
«Chunka ñawpa hawarikuna» nos recuerda la importancia de conocer y reconocer nuestro pasado, por medio de episodios maravillosos o fabulosos. Mediante los relatos de Mario Waranqhamaki, con muchos personajes y hechos no registrados por historiadores, comprendemos de una manera poética y eufónica las raíces de nuestras tradiciones, costumbres y creencias.