El premio queda en casa. El escritor español Ray Loriga (Madrid, 1967) se alzó con el Premio Alfaguara de Novela, en esta edición especial (celebran 20 años del premio) por su novela Victoria, que se publicará con el título de Rendición. El galardón, dotado con 175.000 dólares y una escultura del artista canario Martín Chirino, es uno de los más importantes del circuito.
«Cuando leí «El guardián entre el centeno», pensé, ¡coño! es como «El Lazarillo de Tormes» con Nueva York detrás. Venía de una referencia. Nueva York era un paisaje pero ahí estaba; la picaresca no es más que la situación de una persona cualquier ante cualquier circunstancia y de cómo intenta protegerse de ello, sacar algún provecho vital, donde el hambre aprieta y la dignidad mata. De eso quería hablar en este libro ¿Quiénes somos cuando nos aprietan las circunstancias, quiénes somos de verdad? Esa es la pregunta que me hago en este libro», dijo Loriga en la presentación del premio, transmitida en vivo vía la fanpage de Facebook de la editorial.
Rendición se impuso de una lista de 665 manuscritos, de los cuales 305 fueron remitidos desde España, 107 desde Argentina, 91 de México, 50 de Colombia, 48 de Estados Unidos, 23 de Chile, 21 de Perú y 20 de Uruguay. Según la editorial se trata de una distopía sobre «una sociedad en la que lo privado es de dominio público» y donde «impera un orden riguroso, una calma autoritaria y una absoluta transparencia: no están permitidos los secretos ni las paredes».
Creado en 1964 y relanzado en 1998, el premio Alfaguara ha acumulado en estas dos décadas dos millones de ejemplares vendidos en las dos orillas, y entre sus ganadores, destacan Sergio Ramírez, Elena Poniatowska, Laura Restrepo, Santiago Roncagliolo, Juan Gabriel Vásquez o Eduardo Sacheri.
El jurado estuvo presidido por Elena Poniatowska, y compuesto por Eva Cosculluela, Juan Cruz, Marcos Giralt Torrente, Andrés Neuman, Santiago Roncagliolo, Samanta Schweblin y Pilar Reyes (con voz pero sin voto).