Escribe Gioconda Belli
Quisiera un aguacero en venganza, un aguacero con todo el llanto que estos días han derramado sobre Nicaragua.
Uno cree haber llegado al tope del horror que le tocaba ver, pero viene otro día y el asombro de nuevas maneras de mentir o de matar supera al del día anterior. En medio de los ataques de los paramilitares a los Pueblos Blancos: Diriá, Diriomo, Catarina, San Juan de Oriente, oír discursos sobre cómo ésta semana de tanta muerte ha sido «una semana victoriosa», ver anuncios anónimos donde se acusa a los obispos y sacerdotes de haber convertido los templos en «cuevas de delincuentes», ver un turba atacando al Obispo Matta de Estelí con morteros y luego gritando frente a la casa donde se refugió, «Judas y Asesino», al valiente sacerdote, y saber que el partido los han mandado a hacer, que el Presidente y su Vice esposa están instigando todos los días para convencer a la gente de que esta protesta está hecha por ¨»terroristas» y «delincuentes».
Ver cómo quedó la iglesia que dio refugio a los estudiantes que se habían tomado la UNAN, toda rafagueada hasta que la dejaron como un pascón y mataron a dos muchachos…es muy duro de asimilar.
Bastó una protesta por la manifestación que el gobierno mandó reprimir el 18 de abril con lujo de violencia para que esta pareja echara por la borda la cordura y sacara a relucir la intolerancia más extrema. En los dos días que siguieron a las protestas mataron a 23 personas. Y de esa torpeza de ellos se desató el diluvio, y el pueblo salió a la calle en masa y vomitó la frustración de 11 años de tener que bajar la cabeza por miedo o por pensar que de nada servía votar, ni criticar, pues ellos siempre se salían con la suya. En fin.
Esta semana han embestido contra todos nosotros, los que pensamos diferente. Y su versión de «amor, paz, reconciliación y fe en Cristo» apenas empieza. Qué terrible pensar en aquel 19 de Julio, hace 39 años, donde pensamos que para siempre habíamos abolido la tiranía en Nicaragua. Jamás habría pensado que otra vez tendría esta sensación de estar en manos de un poder capaz de aplastar a su pueblo y para colmo, cobijados con esa bandera rojinegra por la que tanta gente buena y que quise, murió….
Gioconda Belli.
Julio 16, 2018 (Tomado del Facebook de la poeta).